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jueves, 4 de febrero de 2016

Demasiados buitres tras las hipotecas

La venta de créditos fallidos a fondos de inversión se convierte en arma contra los desahucios

Desde el año pasado, cada vez más sentencias están parando desahucios porque los jueces creen que cuando un banco vende una hipoteca impagada a un fondo de inversión, ya no puede reclamar la vivienda hipotecada. Afectados por hipotecas titulizadas se agarran a este detalle para continuar en sus hogares hasta que aparezca el legítimo dueño que reclame la casa. Algunas hipotecas han sido vendidas en miles de trozos, lo que puede retrasar la reclamación de la deuda

Arancha, de 11 años, escribió en un rinconcito de su habitación: “No te olvidaré casa”. Fue su despedida apresurada antes de dejar el que había sido su hogar durante nueve años. El aviso de desahucio llegó a su familia en junio, y antes de abandonar su casa y arrastrar la deuda, decidieron aceptar lo que una nueva empresa que no conocían no dejaba de ofrecerles por teléfono, una supuesta dación en pago. “Nos llamaban día y noche de Anticipa[inmobiliaria especializada en vender saldos de bancos a la que Catalunya Caixa había vendido la hipoteca]. Nos decían que mis suegros, que nos avalaron la compra de la vivienda, que costó 300.000 euros, iban a perder su piso. Repetían que la única manera de que conservaran la casa era que nos deshiciésemos de la nuestra, que iba a ser un alivio...”, recuerda Inma Escudero, madre de Arancha. 

Tal fue la insistencia que ella y su marido, Faisal Laloui, acabaron firmando lo que la intermediaria les puso por delante. Y resultó no ser una dación en pago, sino un contrato de compraventa. “Nos engañaron. Ni siquiera reconocieron que esta era nuestra vivienda habitual, así que el contrato nos obligaba a pagar tasas por la venta y a no reconocer la situación en que nos dejaban, en la calle –cuenta Faisal–. El notario llegó a decirnos que era la primera vez que hacía una operación así, que no sabía bien cómo hacerlo, que nos llamaría si había que arreglar algo. El contrato lo iban escribiendo mientras nosotros estábamos allí, hasta la suma de lo que debíamos la iban haciendo con nosotros delante. «Es por vuestro bien», nos repetían”.
Fuente: http://www.interviu.es/reportajes/articulos/demasiados-buitres-tras-las-hipotecas

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